viernes, 1 de mayo de 2020

The benefits of being an octopus

Zoey es una puberta que debe lidiar no solamente con las experiencias de su edad sino también con sus circunstancias familiares peculiares: vive en la casa del nuevo novio de mamá, Lenny, con su mamá, Kara, sus tres hermanos pequeños (Bryce, Aurora y Hector) y el papá de Lenny, Frank.

Lenny tiene dos trabajos, un tráiler donde vivir, un coche para desplazarse y una colección de DVD ordenada alfabéticamente. A simple vista, es mucho mejor partido para la familia que los anteriores pero las apariencias engañan.

Kara, la mamá, trabaja en la pizzería y su compañero de trabajo y amigo Connor, les ayuda a cuidar a Hector mientras Zoey llega de la escuela por él. Lenny tiene una mezcla de celos y horror hacia Connor e intentará disolver esa amistad. Justo como lo hizo con Crystal, la mamá de Fuchsia, amiga de Kara y distanciada de ella por el momento.

Zoey es una chica que siempre ha sido mal vista por sus compañeros debido a su aspecto: no usa ropa a la moda y prefiere estar callada. Sus mejores amigos son Fuchsia y Silas: la primera desde la infancia y el segundo porque vive muy cerca. Silas y su papá salen a cazar y eso le recuerda a Zoey cuando ella misma lo hacía.

Me simpatizó mucho Zoey y ver la realidad desde sus ojos nos permite salir de nuestra burbuja de privilegios: ama su único libro y desearía poder tener dos. Y ese deseo se transforma en acción cuando se da cuenta de que, para ella, la situación familiar no va a mejorar a menos que haga algo.

Sus hermanos son niños que están aprendiendo a lidiar también con su realidad: Hector es todavía un bebé peroo Aurora y Bryce ya se dan cuenta de que Lenny no es tan bueno como lo ven los demás.

Kara hace su mejor esfuerzo en lo que ella considera mejor para su familia y deberá tomar una decisión indispensable para el bienestar de todos: es una mujer fuerte que se ha visto en una situación que no puede controlar pero sí cambiar.

Me gustó mucho la historia, se me apachurró el corazón en muchos pasajes pero al final la esperanza prevaleció y eso me dejó alegre.

Ann Braden es una autora que fue profesora: esta es su primera novela. Además de escribir, se ha involucrado en muchas causas sociales en su comunidad y fuera de ella.

Recientemente SM Ediciones publicó una traducción al español y puede ser consultada para ser incluida en los libros para el siguiente ciclo escolar en este enlace.


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