Esclavas del poder

En mi lista tentativa de lecturas para el maratón de lectura Guadalupe Reinas de las chicas de LibrosB4Tipos había elegido otro libro para la consigna un texto periodístico pero me pareció que era el momento para leer este.

Se trata de una investigación de mucho tiempo acerca de la trata de personas, específicamente de mujeres y niñas para el comercio sexual.

La autora, Lydia Cacho, ha dedicado su carrera profesional a investigar temas difíciles no solamente por lo que implica realizar el trabajo periodístico sino por la repercusión social que tienen: son temas de los que todos tienen una opinión pero muy pocos se dedican a buscar información verídica.

El libro empieza mostrando la realidad en Asia y pareciera que es todo muy lejano. Pero luego llega a los casos de Latinoamérica y especialmente México y es cuando uno como lectora se da cuenta de que no se trata de situaciones fuera de nuestra realidad sino de algo que pasa muy cerca de nosotras.

Se presentan datos no solamente de las víctimas sino también de los victimarios, de las redes que permiten, solapan y se benefician de la trata de personas, de los esfuerzos que han hecho las organizaciones tanto del gobierno como ciudadanas, así como de las leyes con las que se trata de cambiar la situación actual.

Es difícil leer tantos casos que no se resuelven, cuesta trabajo creer que no sea posible resolver mediante la vía legal cuando se tienen pruebas: la víctima y sus costumbres son las que se ponen en tela de juicio y no las de quienes la involucraron en ese esquema. En ese sentido es similar a los casos presentados por Lydette Clarión en La fosa de agua: no hay buenas víctimas pues siempre se buscan "detalles" que permitan descalificar sus testimonios.

Una lectura necesaria para estar informados de lo que sucede y tratar de dejar la indiferencia.