Se trata de la historia de Chihiro una chica que recién perdió a su madre y está pasando por el periodo de readaptación a su vida sin tener que cuidarla. Conoce a Nakajima, su vecino de enfrente, con quien establecerá una relación extraña al principio pero más sólida conforme se vayan develando los secretos de ambos.
Me gustó mucho cómo vamos conociendo a los personajes y al mismo tiempo que ellos nos vamos encariñando: si desde el principio hubiera sabido el secreto de Nakajima probablemente lo hubiera visto con ojos de compasión pero al saberlo después de conocerlo en el presente, los hechos del pasado toman otra dimensión. Lo mismo pasa con Chihiro: asistimos a su evolución personal y artística, al conflicto de tomar en serio su obra primero ella misma para que los demás también lo hagan.
Las figuras de las madres de ambos están constantemente en el fondo, ya sea como parte de la trama o ya sea como recuerdos que perviven e influencian el presente. Ambas hicieron su mejor esfuerzo para criar a sus hijos aunque los resultados probablemente no las dejaron satisfechas. En cuanto a los padres, el de Chihiro trata de hacerse presente y apoyar a su hija mientras que el Nakajima se ve sobrepasado por los eventos y prefiere retirarse.
La conexión que tuvieron con el par de amigos de Nakajima, Mino y Chii en el principio parece una simple amistad de la infancia pero explica su relación con el secreto de Nakajima y todo toma otro aspecto. Este par de personajes son los que le dan un toque inesperado al texto y lo enriquecen.
Una lectura para reflexionar sobre la idea de una relación de pareja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario