miércoles, 26 de diciembre de 2012
Frozen
Yo y mis afanes masoquistas queríamos ver esta peli y sí, me dio angustia y miedo, tal como lo supuse.
Tres adolescentoides se suben una última vuelta para esquiar, pero por azares del destino nadie se da cuenta de que se quedan hasta arriba, apagan todo y se van los encargados hasta la siguiente semana. El primero, trata de salvar a los demás, brinca, se rompe las dos piernas y se lo comen los lobos. Pasan las horas, llega el día. El segundo escala para llegar a un poste con escalera, después de hacerse trizas las manos logra bajar, usa un deslizador, lo perdemos de vista, pero vemos cómo lo siguen los lobos. La tercera se queda en la silla, se va soltando del cable, queda a buena distancia del piso, se lanza pero se le olvida hacerse a un lado y la cae encima. Con todo y pata cucha, se va, se encuentra a los lobos comiéndose al segundo, la dejan ir, llega a la carretera, la salvan, fin.
Quisiera decir que nunca voy a volver a ver una peli de este estilo, pero me gustan, no sé por qué si me angustian tanto.
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