Yásnaya Elena A. Gil es una de las voces actuales más reconocidas en el tema de la diversidad lingüística y los derechos lingüísticos en nuestro país: con una formación académica en lingüística, sus esfuerzos por mantener la vitalidad del mixe (y en general de las lenguas originarias) son transdisciplinarios: no se trata solamente de las lenguas sino de la forma de vida en las comunidades y cómo las estrategias oficiales no consideran todos los factores en sus políticas lingüísticas.
En este volumen se reúnen 39 artículos que se publicaron por primera vez en su blog en la plataforma de Este país, los cuales han sido editados y organizados en 3 grandes partes: "Orgullo y prejuicios" en los que se trata de las actitudes de los hablantes de diversas lenguas ante el resto de los hablantes, del prestigio de algunas lenguas y del dominio de unas sobre otras así como de la identidad de las comunidades; "Dejar de crear puentes" en los cuales reflexiona acerca de las formas y las motivaciones para crea programas en las comunidades y en el país en general para conservas las lenguas indígenas; "¿Qué nombre le pondremos materilelireró?" en los cuales se presentan ejemplos de acciones concretas y útiles para contribuir no solamente en la conservación sino en el uso cotidiano de las lenguas.
Me gustó mucho la organización de cada texto pues no solamente escribe sus ideas acerca de cada tema sino que invita a la reflexión del lector tanto con preguntas directas como al presentar datos que dejan pensando en nuestras propias acciones y actitudes acerca de las lenguas.
Un detalle que me parece relevante es el modo en el que se mantuvieron los enlaces que se incluían en la versión publicada en el blog de estos textos: a través de código qr y de notas, los nuevos lectores nos podemos acercar a los materiales que la autora ha ido recuperando y que ejemplifican los temas tratados en cada texto.
Una lectura necesaria para todos, tanto monolingües como bilingües, para abrir nuestras perspectivas y considerar cómo hemos actuado en relación a las lenguas que hablamos y con las que convivimos, sobre los hablantes y cómo reaccionamos ante ellos, para reflexionar y empezar a actuar en este tema fundamental para todos.
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