viernes, 1 de marzo de 2019

Siempre hemos vivido en el castillo

El año pasado leí La maldición de Hill House, primera historia que conocí de Shirley Jackson, si bien ya había escuchado mucho sobre ella.

En esta historia conocemos a las hermanas Blackwood quienes viven en la casa familiar junto con el tío Julian, quien ya está enfermo y casi no puede moverse. Al pueblo únicamente va Mary Katherine "Merricat" y todos la ven feo cuando lo hace. Nos enteramos que la razón es que hace unos años su hermana Constance envenenó al resto de la familia y desde entonces no ha salido de la casa.

Merricat tiene una imaginación muy viva y junto con su gato Jonas sale al bosque a jugar, hace su refugio entre las hierbas y se dedica a enterrar cosas como una especie de conjuro para protegerse a ella y a su hermana. Constance se encarga de las cosas prácticas: la comida, la casa y cuidar al tío. Llevan una vida estable y feliz para ellas cuando de repente todo se ve modificado cuando llega el primo Charles, hijo del hermano del padre, quien se mantuvo al margen durante el juicio a Constance. Ahora ha llegado con ellas con el único propósito de recuperar el dinero de la familia.

Mi personaje favorito fue Merricar, con todo y el secreto que conocemos en el último tercio de la historia: me parece que tiene muy claro lo que quiere y cómo conseguirlo, su vida es sencilla y así quiere que permanezca. Lo que más quiere en el mundo es a su hermana y a su gato, además de su privacidad en la casa.

Constance me pareció un personaje, al principio, muy soso, pero conforme sabemos lo que verdaderamente sucedió con la familia, me fue cayendo mejor y al final definitivamente simpaticé con ella. En cuanto al tío es nada más una especie de enlace con lo que fue su familia en el pasado, pues vive recluido y con poca participación en la historia.

La relación que tienen los habitantes del pueblo con ellas es extraña: las aceptan como parte del folclor local pero al mismo tiempo les temen, tanto es así que cuando ven la oportunidad de sacar su negatividad, lo hacen sin pensarlo dos veces.

El desenlace me gustó: va de acuerdo con la idea que se fue formando de las hermanas. Una historia con misterio, no tanto de miedo sino de querer saber qué pasó y cómo afectará el presente.


No hay comentarios:

Publicar un comentario