sábado, 15 de agosto de 2020

¡En casa me lo sabía!

Nando López es un escritor que también fue docente de adolescentes durante varios años. En sus libros de ficción se nota este contacto que tuvo con los chicos y su entorno.

En sus libros de no ficción (aunque quisiéramos que muchas de estas situaciones fueran inventadas) muestra cómo es la vida dentro y fuera de las aulas, con sus sinsabores y sus logros.

En Dilo en voz alta y nos reímos todos presenta situaciones del día a día en el aula, mientras que en este libro se presentan las vicisitudes de docentes, estudiantes y padres de familia entorno a ese mal (necesario) de nuestro tiempo: los exámenes.

El humor que tiene en su cuenta de Twitter se mantiene en todo este volumen, acompañado de aportaciones de docentes de diferentes lugares, para darnos cuenta de que hay situaciones que no reconocen geografía para suceder.

Dentro de este humor hay también espacio para la reflexión y la crítica, sobre todo a esos "expertos" que hacen leyes acerca de la docencia y nunca han estado frente a grupo; "gurús" que dicen tener la estrategia más efectiva para impartir cualquier clase y en general el público en general que se cree con la capacidad para opinar sobre un tema que apenas conoce por encimita.

Un libro para que quienes hemos vivido estas situaciones tengamos una "terapia grupal" y para que quienes nunca lo han hecho, tengan una pequeña muestra de cómo es este aspecto de la docencia. 


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