En este mes se cumple un año de la muerte de Liliana Bodoc y para conmemorarlo se organizó la dinámica Leamos a Liliana en la cual además se llevaron a cabo varios eventos.
Esta es la historia de un grupo de pubertos que deben realizar como tarea para la clase de la maestra más exigente una entrevista a un personaje de su comunidad. Obviamente el equipo lo organiza la maestra y los integrantes están menos que contentos. De todas maneras, una de ellas propone una opción y todos la aceptan. Sin embargo, las cosas no salen como tenían planeado y deben recurrir a otro de los integrantes, cuya opción resultará una sorpresa para todos.
No pude evitar sentirme identificada con el personaje de la maestra y luego vi claramente a varios de los pubertos que conozco en los integrantes del equipo. Esto provocó que la lectura se volviera más personal y que la viera desde otra perspectiva.
Me gustó mucho cómo un tema que parece simple, se convirtió en el detonador para conocer las tramas y los deseos de los personajes. En cuanto al entrevistado, cumple muy su objetivo de ser un catalizador para que se pongan en movimiento algunos de los eventos.
Una lectura muy recomendable para quienes alguna vez han hecho un trabajo en equipo que no salió como se esperaba.
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