La mujer que vivió un año en la cama

Sue Townsend se dedicó al periodismo y a la literatura. En 1982 publicó El diario secreto de Adrian Mole y desde entonces ha sido un bestseller.

En esta novela conocemos a Eva, una mujer que ha criado a sus hijos mellizos y se ha dedicado a su familia durante toda su vida. El día que sus hijos se van a la universidad decide acostarse en la cama y no salir. Su esposo no sabe qué está pasando y deberá adaptarse a esta nueva rutina.

Me gustó mucho el personaje de Eva pues se da la oportunidad de tomar un tiempo para ella, sin estar al pendiente de los demás. Y aunque sufre en algunas ocasiones, en general es una experiencia que le permite reflexionar sobre sí misma y cómo ha interactuado con los demás.

El personaje que más me desesperó es el esposo ya que en lugar de tratar de entenderla, pasa todo el tiempo juzgándola, pidiendo ayuda y, cuando parece que por fin va a comprenderla, llegan a "rescatarlo".

Mención aparte merecen los hijos, quienes son una muestra de lo que sucede cuando se les da todo sin exigirles nada: como son considerados genios de las matemáticas se les "perdonan" sus actitudes groseras y egoístas, desconsideradas y sobre todo, inmaduras.

Un detalle que no me gustó fue la subtrama romántica de Eva: no me parecía necesario que, en ese momento de su vida, llegara un nuevo interés amoroso. De todas maneras, me gustó cómo lo resolvió la autora.

Una historia para pensar en cómo damos por hecho que las personas cuidadoras siempre estarán ahí para nosotros.