domingo, 3 de marzo de 2013

Después de Lucía

Había leído de esta peli pero no pensé que fuera tan fuerte, que dejaran que el tema del acoso y la violencia llegara a tanto. A ratos es demasiado, la indiferencia del papá está justificada porque está viviendo su duelo por su esposa, pero la de los maestros no tiene perdón, de plano quedan muy mal: pasan cosas horribles bajo sus narices y ni sus luces, cuando empiezan a hacer algo ya es demasiado tarde. El final no me gustó, me hubiera gustado que el papá la encontrara, nos dejan con la angustia de él, de que, por más que ya ejerció la justicia por sí mismo, sigue sin saber que su hija está viva, sana no, pero viva. Que los chavos no son actores profesionales salta a la vista desde las primeras escenas y dan escalofríos de que les saliera "tan natural" tanta cosa horrible, no por la peli en sí, sino porque es fácil imaginarse a los pubertos que uno ve por la calle haciendo esas atrocidades con sus compañeros. ¿Qué les pasa a los chavos actualmente que son capaces de llegar a esos extremos? ¿Dónde se perdió el respeto por el otro, por el igual? ¿A qué horas las bromas se volvieron violencia física, fuerte y sin miramientos? Qué miedo volver a ser adolescente en esta época.

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