Se cuenta la historia de Kim, una conductora de televisión superficial que solamente se preocupa por su carrera, nunca le hace caso ni a su esposo ni a su hija hasta que muere y reencarna en una hormiga: tiene que juntar buen karma para seguir reencarnando en diferentes animales. Su plan inicial es separar a su esposo de Nina, quien fuera su mejor amiga en la juventud. Para lograrlo, pasa de vida en vida, sufriendo y aprendiendo hasta que finalmente llega a su propio nirvana.
Aunque no se nota a simple leída, la moraleja de la historia es divertida y deja con un buen sabor de boca, incluso con optimismo ante las reencarnaciones.
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