Díganme por favor que esto no es la última parte de Dexter. No creí que me fuera a decepcionar, dije, después del nauseabundo final de la serie, esto tiene que ser mejor. Digo, mejor sí es, pero no le llega a los primeros tres libros. Y no es tanto por el final abierto (que sí me chocó pero fue comprensible) sino porque nos muestra a un Dexter demasiado diferente al que habíamos visto, demasiado "terrenal" lo que nos lleva a preguntarnos si lo único que le hacía falta para ser "normal" era enamoriscarse de una actriz de tele.
¿Cuál final esperaba para Dexter? No me había querido hacer una idea, pero definitivamente no me esperaba que siguiera con su mida de fachada muy quitado de la pena, así que en ese aspecto me dejaron a gusto. ¿Esperaba que cambiara por completo su vida, como lo estuvo deseando durante un par de capítulos? No, tampoco eso me convencía. Probablemente dentro de un par de días, cuando haya pasado la emoción de acabar de leerlo, pueda darme cuenta de que fue de hecho la mejor opción.
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