viernes, 12 de abril de 2013

La huésped

Empiezo con una confesión: los libros de Crepúsculo me gustan. Disfruté leyéndolos uno tras otro como en mi adolescencia cuando leía un libro tras otro tras otro. Me parecen entretenidos y adictivos y por eso quise leer otro libro de la misma autora, pero me costó. Me costó entrar en la historia, no sé si porque es muy diferente a Crepúsculo, no sé si por la historia misma, el caso es que, en las edición de 500 y tantas páginas que lo leí, las primeras cien nomás no me convencían, las siguientes 100 me desesperaron por lenta la acción y el resto me gustó mucho, tanto, que leí con muchas ganas hasta llegar al final feliz. No quiero buscarle similitudes y diferencias con Crepúsculo, solamente me basta con saber que me gustó, que es una historia de amor y sobrevivencia, que me entretuvo, me aisló de un par de situaciones y me emocionó. Razones suficientes para disfrutar un libro. Me hubiera gustado saber más de los parásitos y que no fueran tanto tiempo los malos de la historia. Los personajes me cayeron bien y me parecen suficientemente bien construidos: sabemos por qué hacen lo que hacen y cómo van a reaccionar. Ahora a esperar la peli para despotricar con las cosas que cambien u omitan.

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