lunes, 1 de febrero de 2010

Decidir

Y bueno, uno decide casarse, "dejar de vivir en pecado" y resulta que no es tan fácil como suena... que los millones de requisitos, que la casa, que los muebles, que esto y lo otro... logras una cosa y aparecen tres pendientes más... y por si eso fuera poco, en el registro civil tampoco ponen las cosas al alcance de la mano. Hagamos cuentas: un día para ir a pedir los requisitos (porque líbrelas el dios de su preferencia de dar informes por teléfono), un día para ir a hacerse los análisis, un día para ir por el acta de nacimiento (original, reciente, certificada por todos y cada uno de los sujetos del registro), un día para ir a hacer la cita del matrimonio (de 9 a 2pm, por supuesto) y el día de la boda... digo, después de tantos permisos en el trabajo, seguro que ya te corrieron... Así que como un servicio a la comunidad (y para sacar el estrés, que ninguna clase de kick boxing lo logra con tanta eficiencia como quejarse con alguien) pondremos aquí todos esos pequeños detalles que surgen, con la esperanza de que mis (nuestros) ataques de pánico le eviten alguno a alguien allá afuera.

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